Te vi!.
Te vi…
y el mundo, que era gris, cambió de matiz.
No supe tu nombre, ni quise saber,
porque bastó tu risa para entender.
y el mundo, que era gris, cambió de matiz.
No supe tu nombre, ni quise saber,
porque bastó tu risa para entender.
Te vi…
como se ve la luna entre la niebla,
como quien encuentra la paz en la guerra.
No buscaba amor, lo juro por mí,
pero llegó con tu forma de decir “aquí”.
como se ve la luna entre la niebla,
como quien encuentra la paz en la guerra.
No buscaba amor, lo juro por mí,
pero llegó con tu forma de decir “aquí”.
Y no fue un flechazo, fue una canción,
que empezó en tus ojos y terminó en mi razón.
Te vi, y mi alma —como un niño—
corrió a abrazarte sin ningún diseño.
que empezó en tus ojos y terminó en mi razón.
Te vi, y mi alma —como un niño—
corrió a abrazarte sin ningún diseño.
No eras perfecta, eras verdad,
y eso, amor mío, fue tu gran bondad.
Porque el amor que más nos repara,
es el que llega sin pedir nada.
y eso, amor mío, fue tu gran bondad.
Porque el amor que más nos repara,
es el que llega sin pedir nada.
A veces, el amor no se busca, se encuentra.
No entra con promesas, entra por la puerta abierta.
Y cuando alguien te mira y te ve de verdad…
ya no volvés a mirar igual.
No entra con promesas, entra por la puerta abierta.
Y cuando alguien te mira y te ve de verdad…
ya no volvés a mirar igual.
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