Llamado nocturno al bar (fc).

 

Llamado nocturno al bar.

Bar de la esquina,
te llamo bajito,
no vengo por vino,
vengo por rito.

Hoy no quiero fiesta,
ni trago, ni ruido,
quiero tu mesa
y un oído.

Que el día fue largo,
y el alma cansina,
necesito un barman
que no opine…
pero me mire encima.

Quizás cuente algo,
o quizás me quede callado,
pero vos sabés, bar,
cómo sanar al callado.

En tu humo flota
la historia del pueblo,
de tipos vencidos
que igual se mantuvieron en duelo.

Y vos, barra gastada,
sos altar de las penas,
donde la tristeza
se vuelve apenas.

Una charla con extraños
que sienten lo mismo,
la certeza compartida
de no estar tan solos en el abismo.

Va sin mucha vuelta:
a veces un bar es familia
cuando la noche aprieta.

No todo lo cura el sol,
ni todo lo arregla el tiempo,
a veces cura más
un vaso…
y el viento.

XUS