sábado, 4 de octubre de 2025

El peso invisible.


El peso invisible.

Camino y no sé si avanzo o floto,
llevo cosas que no pesan — pero agotan —.
Un adiós mal cerrado,
una culpa que nunca se borra,
un amor que se quedó dormido en la sombra.

El alma, dicen, no pesa.
Mentira:
te aplasta los hombros en días sin sol,
te levanta el pecho cuando alguien te abraza.

Somos reflejos,
yo digo que somos reflejos con grietas,
intentando brillar igual.

Me arranco los miedos, respiro, y sigo.
El peso invisible no se ve,
pero enseña a vivir más liviano.


 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias!

Entradas populares

Destacados

Gato, no sos el centro del mundo.

Contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *