La casualidad más bonita.

Eres la casualidad más bonita en mi vida,
como un verso perdido que de pronto se abriga.
Caminaba sin rumbo, con dudas y heridas,
y encontré en tu mirada la razón de mis días.

El azar no existe,
que todo es un hilo invisible y que persiste.
Yo lo sentí cuando la noche me habló,
y tu risa sencilla mi silencio quebró.

La calle me enseñó que el amor sorprende,
que no siempre llega cuando uno lo entiende.
Un café compartido, un abrazo, un error,
terminaron bordando el destino en amor.

Es simple de decir, profundo de sentir,
contigo aprendí lo que es existir.
Y si el tiempo se rompe, si el mundo se olvida,
seguirás siendo la casualidad más bonita en mi vida.

XUS