Hermano, mi reflejo.

Te amo, hermano, lo digo sin careta,
en la vida aprendimos que la sangre conecta.
Jugando en la calle, soñando en la esquina,
aprendí que tu risa también me ilumina.

Crecimos peleando por cosas tontas,
pero al final del día tu abrazo me importa.
Del alma, verdad sin disfraz,
la lealtad se escribe y no se borra jamás.

En noches oscuras me diste la mano,
cargando mis penas, firme, cercano.
El tiempo nos inventa,
pero tu presencia lo hace más lenta.

Hermano, mi espejo, mi historia, mi unión,
te amo sin dudas, de todo corazón.

XUS