Fragmentos del ser.

Cuerpo fragmentado,
como páginas sueltas de un libro sin índice,
como calles que se cruzan sin destino.

Me rompí en silencios,
cuando el amor se fue sin avisar,
cuando la amistad se volvió eco,
y la fe se me cayó de las manos.

Pero en cada pedazo encontré algo:
una risa vieja,
un abrazo que no se borró,
un recuerdo que me sostuvo en la noche.

Aprendí que no somos enteros,
que nadie camina sin grietas,
y que la fuerza no está en lo intacto,
sino en lo que insiste en renacer.

Fragmentos del ser,
como notas sueltas que hacen música,
como heridas que se vuelven mapa.

Y yo, que un día me sentí ruina,
hoy me reconozco en cada parte,
y sonrío al entender:
que no hay fragmento inútil,
que todos cuentan mi historia.

Cuerpo roto, alma viva.
Fragmentado, pero eterno.

XUS